Respaldo al magisterio; la otra cara de la movilización

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; 26 de mayo de 2016.- «¡Maestro, amigo, el pueblo está contigo! ¡maestro, aguanta, el pueblo se levanta!»
El coro provoca el llanto de un grupo de profesores y aunque algunos intentan contener las lágrimas, es inevitable. Aprietan los ojos pero no funciona.
A uno de ellos le importa poco que lo vean llorar y como reverencia, junta las manos para agradecer en repetidas veces a los vecinos, que en unísono repiten las mismas consignas y demuestran su apoyo.
Madres de familia abrazan a los maestros y la emoción los embarga, les hacen saber que no están solos, lo gritan en coro y les animan a continuar con su lucha; ¡fuerza maestros!, se escucha una voz entre la multitud y en segundos, se repite la misma frase entre el tumulto que hace “retumbar” el campamento improvisado de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
Ahí culmina la marcha de más de 5 mil personas, entre madres y padres de familia, estudiantes y ciudadanos, en apoyo total al movimiento magisterial y en rechazo a la represión policiaca que la mañana del miércoles había sacudido a la capital.
Parte desde la fuente de la “Diana Cazadora” hasta el campamento de resistencia magisterial; era un contingente vestido de blanco, como símbolo del motivo de su lucha: paz en el estado y mesa de diálogo entre el gobierno y la CNTE.
Los carteles con un sin fin de leyendas que coinciden en seis peticiones, con distintos matices: ¡Fuera federales! ¡Paz en Chiapas! ¡Alto a la represión!, ¡No a la Reforma educativa! y ¡No más agresiones a los maestros!
La avenida que horas atrás fue un campo de batalla entre policías y maestros, ahora era todo lo contrario; en lugar de palos, piedras y gases lacrimógenos habían tan sólo voces de rabia y hartazgo, consignas que sacudieron el bulevar de manera distinta al de los cañones que lanzaban los gases por la mañana.
“FUERA FEDERALES”
La misma historia se repitió en Chiapa de Corzo la noche de ese mismo miércoles, cientos de habitantes marcharon para expresar su respaldo a la CNTE y exigir el retiro de las fuerzas federales de Chiapas.
“Lárguense de nuestro pueblo”, “No son bienvenidos aquí”, gritaban en las afueras del hotel La Ceiba, en donde los agentes de la Policía Federal estaban hospedados.
Las consignas subieron de tono y con cada grito aumentaba el coraje del tumulto, al grado de convertirse en una caldera de voces hirviendo que ni siquiera la voz detrás del megáfono podía controlar. Estaban indignados por la represión contra los maestros, explicaron después a los periodistas.
-¡No los queremos aquí, váyanse asesinos!, presionaron.
La respuesta de la policía llegó de inmediato y el grupo de antimotines inició con el uso indiscriminado de gases lacrimógenos contra los pobladores; las calles se llenaron de humo y en lugar de replegarlos, los pobladores regresaron al mismo punto, hasta que los fuerzas federales se retiraron del hotel.
El contingente de madres y padres de familias, jóvenes, estudiantes y hasta adultos mayores, se concentró en el parque principal de Chiapa de Corzo y otro grupo se atrincheró en la entrada principal de la ciudad para evitar que la policía regresara.
Un canto unánime se escuchó en varias ocasiones mientras los autobuses con los policías partían del lugar. ¡Ellos son, ellos son, los que chingan la nación!, sentenciaban orgullosos. (Agencia Vórtice MX)